Entre soplanucas y muerdealmohadas...

Tras una breve pausa por este rincón debido a mis intensas jornadas de trabajo dedicadas exclusivamente al tema de la paradójica salida de prisión de Julián Múñoz y la inminente separación de la cotizada modelo Laura Ponte, regreso para contaros los últimos acontecimientos sociales vividos en estas últimas horas, cuando regresaba de Madrid a mi ciudad para relajarme unos días en un spa.

Ayer, mientras me relajaba en el jacuzzi de mi habitación, mi tranquilidad se vió perturbada por una llamada telefónica. Era mi querido amigo Mariano Barroso (para los incultillos de este mundo, que no son pocos, Mariano Barroso es un importante director de teatro, que estos días estrena en grandes ciudades de España la obra CLOSER) que me sorprendía con dos noticias. La primera, que me invitaba al estreno de dicha obra, (para los amnésicos, CLOSER). La segunda, que tenía que acudir al palco VIP para rodearme de los invitados famosillos y así, de paso, como quien no quiere la cosa, escribir un artículo para la revista VOGUE (para esos incultillos y amnésicos también, he trabajado durante 5 años en la prestigiosa revista) sumando alguna entrevista a algún que otro invitado con dinero, que eso siempre sube el glamour (aunque el invitado tenga toda LA CARA DEL FARI COMIENDO MOSTACHONES DE UTRERA).

Así que decidí salir a comprarme un modelito de CAROLINA HERRERA, unas cuantas cremas hidratantes y remodeladoras de LÁNCOME y unos zapatos de MANOLO BLANHIK, sencillmente, fascinantes.

Con tal modelito, me fue fácil impresionar al mismísimo, ALEJANDRO AMENÁBAR, que acudía en honor a su amistad con BELÉN RUEDA, una de las protagonistas en escena. Ale, para los que allí estábamos reunidos, iba acompañado de su novio. Sí, como leéis, ¡si ya es sabido por todos!, el chico tiene novio y además, bastante feo, todo hay que decirlo, pero lo que jamás podría imaginarme es que el mismísimo ALEJANDRO AMENÁBAR ME TIRARÍA LOS TRASTOS PUBLICAMENTE. Todo para enterarme después de que quiere contar conmigo para su próxima pelicula... MAR AFUERA. ¿No es alucinante? Eso es como vender mi cuerpo al diablo, porfavor.



Con tanto lío que tuve, limpiándome la baba de mi agitada melena revuelta del dichoso director de LOS OTROS, no tuve tiempo ni para preguntarle por mi amiga Nicole ni para centrarme mucho en la obra, aunque eso sí, BELÉN RUEDA estaba impresionante... impresionantemente prepotente, como siempre.

Al finalizar dicho acto social, me fuí a cenar con unos amigos una ensalada de boletus con trufas al prestigioso restaurante, LUXURY, para así también desconectar un poco del estrés que provoca el famoseo barato que se encuentra uno por los teatros y que me provoca tanta CAÍDA DE PÁRPADOS. Pero que va... mi deseo se vió truncado por un encuentro casual de alguien que estaba en el sitio inoportuno en el momento oportuno (puesto que era un objetivo perfecto para yo criticar allí, en pequeño comité).

El susodicho, fruto de un programa de la telebasura y considerado como PERLITA ABSURDA DE ESPAÑA, no es otro que el grande de ... JAVIÁN, que no es más grande porque ya está la Giralda para ser grande que sino lo era él.


Qué chico... qué cara... qué cuerpo... con cuánto estilo lucía su chaqueta con chanclas... nadie como tú sabe hacerlo tan bien... qué pelo teñido con MECHAS HORTERAS RUBIANCAS de estas que ya NO SE LLEVAN... pero por Dios querido, ¿qué pasa que perdiste todo tu glamour en la selva? ¿o es que sencillamente siempre has sido un hortera de barrio y mercadillo y el glamour se lo dejaste todo a tu compi, Busta?

¡Qué grande! y aún más, Qué grande fue el descubrir que cuando llamabas a Paqui desesperadamente en la selva, en realidad querías decir ... ¡PACO!
Sí, NO DISIMULES, lo sabemos todo, sabemos que "coses pá la calle", "que te hundes en canoa", "que coges dobladillos" ... así, hablando claro y pronto.
Mira chico, permíteme que te regale dos consejos. El primero, que asumas tu condición y que lo luzcas con orgullo (nunca mejor dicho). Y el segundo... Tedoyladireccióndemipeluqueroporquetupelolonecesita.

ENCANTADA de haber sido de nuevo... una serpiente con tacón.